En Guatemala, la inequidad se hereda. Para las jóvenes mujeres Indígenas de áreas rurales, las probabilidades están en su contra desde el inicio de sus vidas. El 79% vive en condiciones de pobreza, el 91% trabaja en la economía informal y más de la mitad se convierte en madre antes de los 18 años de edad.

Es difícil leer estas cifras, ¿cierto? Pero tú y yo también sabemos que las estadísticas no definen a las personas; la determinación y las oportunidades sí.

En MAIA estamos reescribiendo esta historia. Cada día acompañamos, escuchamos y caminamos junto a cada Joven Pionera y su familia. Invertimos en su educación, su liderazgo y sus sueños. Somos una fuerza para el cambio.

Pero aún queda mucho por hacer. Nuestro alcance y el apoyo a más Jóvenes Pioneras, familias y comunidades dependen de la generosidad de quienes creen en este cambio. No podemos lograrlo solas.

Este fin de año necesitamos recaudar $100,000 y necesitamos aliadas y aliados valientes como tú: personas que crean en el efecto multiplicador de invertir en el liderazgo, la educación y el poder de las mujeres Indígenas para transformar nuestras comunidades y el mundo entero.